Neuroprotección y otras preguntas sobre el glaucoma

Las especialistas de IMO respondieron a las dudas más frecuentes de los pacientes en relación a la enfermedad en una mesa redonda organizada con motivo de la Semana Mundial del Glaucoma

Descifrando el glaucoma - Resumen

El diagnóstico y la evolución del glaucoma fueron dos de los asuntos que se abordaron en la mesa redonda “Descifrando el glaucoma”, que formó parte del marco de actividades relacionadas con la Semana Mundial del Glaucoma que ha organizado un año más Fundación IMO para llamar la atención sobre la enfermedad. El acto congregó a un centenar de asistentes el martes, 7 de marzo, en el Auditorio de IMO, y también pudo seguirse en directo a través de internet (ver aquí vídeo completo). En la sesión, las oftalmólogas del Instituto resolvieron las dudas más frecuentes de los pacientes sobre la patología, destacando que “aunque el glaucoma tiene origen multifactorial, la presión intraocular es el único factor de riesgo que se puede controlar y, por ello, todos los tratamientos actuales se centran en reducir esta hipertensión”, según apuntó la Dra. Sílvia Freixes.

En este sentido, la Dra. Elena Arrondo habló de los tres principales escalones terapéuticos. Por un lado los colirios, “que actúan disminuyendo la formación de humor acuoso o facilitan su salida para bajar la presión intraocular y que requieren un cumplimiento estricto de las dosis indicadas para mantener su eficacia”, un problema habitual con el que se encuentran muchos pacientes y que no debe ser pasado por alto. Como siguiente paso o como alternativa a las gotas, existe el tratamiento con láser, “que también puede usarse para prevenir el desarrollo de glaucoma en ojos con ángulo estrecho”. Respecto a la cirugía, la especialista apuntó la seguridad que aportan técnicas como la esclerectomía profunda no perforante, reduciendo el riesgo de posibles complicaciones, una preocupación de muchos pacientes.

Estos también trasladaron sus inquietudes respecto a las estrategias de neuroprotección, “dirigidas a prevenir la muerte prematura de las células ganglionares de la retina, lo que conduce a un daño irreversible del nervio óptico”, explicó la Dra. Laia Pascual. Para ello, “se puede proteger de forma directa este nervio o neutralizar las toxinas que le son dañinas”, como es el caso de los radicales libres de oxígeno. “Se ha visto que están más presentes en ojos con glaucoma y son responsables del “estrés oxidativo” (envejecimiento celular debido al oxígeno), que cada vez más se cree que juega un papel importante en el desarrollo del glaucoma de ángulo abierto”, concluyó la doctora.