La mayoría de niños no han presentado problemas de visión, pero un 4% de los que se han hecho la prueba podrían tener defectos de refracción o ambliopía, más conocido como ojo vago. La sorpresa del equipo de optometristas de IMO, que trabajan estos días en el Festival es que a casi todos los niños a los que se les han detectado problemas de refracción o ambliopía no se les había hecho ninguna revisión anterior ni tampoco usan corrección óptica.
Un hecho relevante si se tiene en cuenta que a partir de los 7 años es difícil solucionar estos defectos de la visión.
El stand del Instituto de Microcirugía Ocular también ofrece a los niños la posibilidad de conocer el funcionamiento del ojo a través de una instalación que simula las principales partes de este órgano. Lee el artículo completo de BTV y mira el vídeo.